Convertirse en B Corp es mucho más que un proceso de certificación. Es, desde luego, demostrar que tu desempeño empresarial va más allá de ganar dinero. Pero sobre todo es creer que una empresa es una oportunidad para construir un mundo mejor. Es una oportunidad para demostrar que pensar en lo que puedes ofrecer a la sociedad es siempre más valioso que pensar en lo que puedes extraer de ella. Es tener en cuenta a las personas, es tener en cuenta el medioambiente.
Para todas las personas que conocéis Espacio Arroelo, quizás esto no os sorprenda. Sabéis que África y María han puesto siempre el foco en que Arroelo sea un nodo del que partan iniciativas y se desarrollen proyectos que ayuden a crear impacto positivo en la comunidad, en la ciudad, en el mundo. Pero lo importante no es que hayan creído en los proyectos en sí, lo importante es que su misión, más allá de alquilar un espacio de trabajo compartido, haya sido empoderar a las personas para que construyan y desarrollen juntas esas iniciativas.
Ahora bien, si este impacto ya es conocido por la comunidad de Arroelo ¿por qué certificarlo entonces? ¿por qué recurrir a que una entidad externa diga lo que ya sabemos? ¿por qué B Corp?
El sistema B Corp es un movimiento global de personas que son emprendedoras, líderes empresariales, inversoras, trabajadoras, consumidoras, etc. con un objetivo común: transformar la forma en que el mundo empresarial y de los negocios mide el éxito. Para ello establecieron un estándar que evalúa el desempeño de una empresa, no sólo en aspectos financieros, sino también en la forma en la que se gobierna, en el impacto social que genera (equipo , personas colaboradoras, proveedoras, comunidad…), y en el desempeño medioambiental.
Como África os podrá decir, es un estándar extremadamente riguroso, que tan solo han obtenido 2.500 empresas en el mundo, alrededor de 50 en España y solo 1 en Galicia. Espacio Arroelo, 1 entre 200 mil.
Certificarse en un estándar así de riguroso es un ejercicio de honestidad. Seguramente, África, María y la comunidad de Arroelo ya es consciente del impacto positivo generado por la entidad. Pero, de cuando en cuando, es necesario salir de las creencias propias y de la burbuja que se forma a nuestro alrededor: las redes sociales y nuestra propia comunidad tienden a rebotar nuestras ideas y esto en muchas ocasiones hace que sobreestimemos la dimensión real del impacto que estamos generando o que no veamos las áreas en las que podemos mejorar.
Pero certificarse también es una obligación moral para las empresas que lideran la transformación (para bien) del mundo en el que vivimos. Que se desafíen, que busquen la forma de mejorar, que sean transparentes, que ayuden a inspirar a otras empresas de que este es el camino a seguir.
El resultado de la evaluación de las áreas en las que crea impacto Espacio Arroelo es ilustrativo: de los 82,8 puntos obtenidos (el mínimo para ser B Corp es 80), casi 60 vienen de crear impacto positivo en el desarrollo de la comunidad (entendida como la comunidad relacionada con Arroelo, pero también como desarrollo de la economía local y de proximidad); 10 es en clientela (en este caso, sobre la comunidad de coworkers); 8 es en medioambiente; y 5 es en la forma en la que se gobierna la empresa.
Esto dice que Espacio Arroelo tiene oportunidades de incrementar su impacto positivo: por una parte midiendo acciones que ya lleva a cabo con su clientela pero que no puede evidenciar y por tanto comunicar con objetividad; y por otra parte mejorando sus procesos e impacto medioambiental. En gobernanza será complicado incrementar el impacto pues una empresa pequeña sin consejo de administración o accionistas tiene limitada la puntuación en esta área.
Ser B Corp es una oportunidad para seguir mejorando, y crear impacto positivo sabiendo que se camina en la dirección adecuada. Como dice el lema BCorp, no se trata de ser las mejores empresas del mundo, sino de ser las mejores empresas para el mundo. Espacio Arroelo está en ello.
Este mismo texto lo hemos publicado anteriormente en el blog de Espacio Arroelo